CALENTURAS ELECTORALES.- Desde diversas comunidades del municipio de #Guadalupe y sus alrededores, varios cafeteros reportan la presencia de una lujosa Suburban blanca que aún cuando no son tiempos de PROSELITISMO POLÍTICO, ya porta el rótulo y diseño a grandes letras de una de las suspirantes a un puesto de elección popular. El mueble dicen, se pasea por los rumbos del IV Distrito Electoral para llamar la atención de los próximos votantes. La camioneta de marras hace propaganda a MARICARMEN SALINAS, actual tesorera del Senado de la República y posible candidata a diputada federal de esta región por designio del Señor. No es ACTO ANTICIPADO DE CAMPAÑA, es cosa de ganar tiempo, dirán algunos. Sobre todo por el escaso o nulo conocimiento que existe en torno de quien de la noche a la mañana aspira seguir cobrando y bien del erario público… con el voto ciudadano.
RESULTADOS, LOS HAY.- A partir del pasado 1 de febrero, fecha en que el GENERAL ARTURO MEDINA MAYORAL toma las riendas de la Secretaría de Seguridad Pública en Zacatecas, tirios y troyanos percibieron un cambio en las POLÍTICAS DE SEGURIDAD. Un mes después, el 13 de marzo, el GOBERNADOR DAVID MONREAL presentó las Fuerzas de Reacción Inmediata de Zacatecas (FRIZ), un grupo de élite compuesto por 100 elementos provenientes de diversas corporaciones. Desde ese momento, hace ya tres meses, no ha habido una semana donde las fuerzas federales, estatales y las FRIZ, asesten fuertes golpes, decomisos y detenciones a miembros del crimen organizado. La pacificación aún no ha llegado. La percepción es harto negativa. Pero después de años de brazos cruzados, comienza a notarse el compromiso por alcanzar la anhelada paz.
GOLPES AL CRIMEN ORGANIZADO.- Ahora, sumado a este gran esfuerzo de los gobierno de México y Zacatecas para abatir los índices de INSEGURIDAD, David Monreal realizó ayer un importante anuncio para HOMOLOGAR EL SALARIO de todos los policías en la entidad a no menos de 12 mil pesos mensuales con efecto retroactivo en el presente año. Hasta la llegada de la presente administración, es importante resaltar que no existía ningún programa ni seguro que los ayudara cuando éstos caían o salían heridos en el cumplimiento de su deber. Cuando esto pasaba, los uniformados y sus familias eran prácticamente abandonados a su suerte. Son pasos modestos frente al gran reto. Pero son pasos para enfrente.